Probablemente hayas visto en alguna ocasión, o al menos por la televisión, esas torres humanas de varios pisos. Esta iniciativa tiene más de 200 años de historia y en el año 2010 en Nairobi «Els Castells» (del catalán cuya traducción es castillos) fueron declarados Patrimonio Cultura Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Si pensamos en ellos podemos imaginarnos el mejor ejemplo de un equipo con cohesión. Un grupo de personas de diferentes edades, sexo, complexión física entrenan durante todo el año para sus actuaciones. Y los integrantes, castellers, tienen en mente su lema «Fuerza, equilibro, valor y cordura».
Os dejo un vídeo muy emotivo de un castillo humano en la escalinata de la Catedral de Girona. El mensaje es que la vida está llena de dificultades, pero lo importantes es volverse a levantar y seguir luchando. ¿Te puede servir de inspiración para tu día a día? La duración es inferior si no ves los títulos de crédito ; ) El minuto 1:01 es importante. Destacaría también el 1:24
Aunque no es el caso de estas personas ¿En que pueden fallar los equipos? Patrick Lencioni nos pone en alerta sobre las cinco disfunciones de un equipo y éstas son
Ausencia de confianza. Sus miembros no quieren mostrar su vulnerabilidad por lo que difícilmente aceptan sus errores y puntos de mejora. «¡Dios Mío, que no se enteren de lo que me equivoqué, no sé o se me da peor!»
Temor al conflicto por lo que las conversaciones son cuidadosas. En muchas salas donde se reúne el Comité de Dirección de la empresa sus miembros mueven constantemente la cabeza afirmando cuando habla el máximo responsable, aunque diga la cosa menos razonable del mundo «Si, mi amo»
Falta de compromiso, aunque de cara a la galería fingen estar de acuerdo «Si, si, habrá que hacer»
Evitar responsabilidades y callarse si se detectan actuaciones de alguno de los miembros que no van encaminadas al bien del equipo. «¿Para qué me voy a complicar la vida?»
Falta de atención a los resultados. Aquí priman los egos, el reconocimiento, la importancia de la propia carrera profesional más que el objetivo colectivo. «Primero yo, luego yo y por último yo»
Comentarios en: "5 disfunciones del equipo" (2)
Hola Concha
Estoy muy de acuerdo con el mensaje de unión y apoyo mutuo aunque no en animar a los niños (esos que suben a lo más alto porque pesan poco) a que hagan esta actividad… pero en fin cada pueblo con sus costumbres…
Si que es difícil evitar que en los grupos de trabajo no aparezcan estas limitaciones de las que hablas!!… si se evitaran las empresas serían imparables.
Gracias por tus post!!
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Hola Rarezas,
He pretendido con el vídeo reflejar con un símbolo como sería un equipo como tu denominas «imparable».
En el post hay cinco disfunciones de equipo que son «de libro», depende de cada uno de los miembros gestionar adecuadamente esas circunstancias para crecer y dejar al «niño en lo más alto».
Gracias de nuevo por ser tan fiel lector y tu participación con tus comentarios en el blog !!
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